La filial chilena del grupo alimentario italiano Parmalat postergará el pago a los productores locales de leche por la crisis en la que cayó la empresa tras descubrirse un multimillonario fraude contable a fines del 2003.
 
Parmalat Chile envió el sábado pasado una nota a sus proveedores lácteos en la que les comunicó que los pagos correspondientes a diciembre, que debían ser cancelados el día 10 de ese mes, se postergan temporalmente, según publicó hoy el vespertino chileno "La Segunda".
 
"Esta situación, como ustedes ya saben, es causada por motivos exógenos a nuestra decisión", dijo Parmalat Chile.
 
La Federación de Productores de Leche, que agrupa a los proveedores chilenos, lamentó hoy la conducta de la empresa, a la que acusó de actuar con falta de seriedad, pues antes había afirmado que la crisis en Italia no repercutiría en su funcionamiento en Chile.
 
"Creemos que esta medida afecta gravemente la confianza entre productores y la empresa, y vemos con preocupación el impacto que esta situación pudiera generar en el sector lácteo a nivel nacional", indicó la entidad, en un comunicado.
 
Los productores emplazaron a la firma a aclarar cómo continuará con su operaciones en Chile y la manera en que cumplirá con sus compromisos financieros.
 
También pidieron a sus asociados flexibilizar los plazos de cobranza establecidos con la empresa, pese al efecto en los flujos de caja que deberán encarar.
 
Parmalat, que llegó al mercado chileno a comienzos de los 90, compra el 7 por ciento de la leche que se produce en este país suramericano.