Haití se quedará sin Parlamento a partir del martes por no haber podido organizar a tiempo las elecciones, mientras se intensifica la movilización para reclamar la renuncia del presidente Jean Bertrand Aristide.
Al día siguiente de manifestaciones que convocaron a 30.000 personas en la capital, Aristide llamó el lunes a los ciudadanos de su país a buscar la "paz" y la "comprensión".
"Que la luz y la paz brillen en todo el país con sabiduría", declaró en un mensaje a la nación antes de partir rumbo a Monterrey (México), donde participará en la cumbre de jefes de Estado de las Américas.
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Haití quedará sin Parlamento a partir del martes, pues los mandatos de sus 83 diputados y de dos tercios de sus 27 senadores caducan el 12 de enero.
"Quince senadores seguirán en funciones a partir del lunes a medianoche", indicó este lunes un influyente senador del partido oficialista Lavalas, Lan Clones. "Dado que el quórum es de 14, esos 15 senadores podrán continuar sesionando en comisiones y sesiones plenarias y el gobierno no podrá gobernar por decreto".
"Por supuesto que las leyes no podrán ser aprobadas, ya que deben serlo también por la Cámara de Diputados y entonces esperaremos las próximas elecciones legislativas", agregó, con la expectativa de que se realicen "lo más rápidamente posible".
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El presidente prometió que los comicios se realizarán en 2004, pero no suministró ninguna fecha.
A pesar de las interminables discusiones y las mediaciones de la Organización de Estados Americanos (OEA), el gobierno y la oposición no lograron ponerse de acuerdo sobre la organización de nuevas elecciones.
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La crisis en la que está sumergido Haití, sobre todo a partir del último otoño boreal, con repetidas manifestaciones de la oposición, de la sociedad civil y de los estudiantes, podría ser abordada durante la cumbre de las Américas.
Jean Bertrand Aristide quiere mantenerse en el poder hasta el término de su mandato en febrero de 2006.
"A mi regreso intensificaremos (los esfuerzos para lograr) esta paz indispensable", prometió el lunes, sin dar más detalles. Volverá a Haití a mitad de la semana próxima.
El lunes tuvo lugar una nueva manifestación opositora.
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La del domingo fue la más importante jamás realizada por la Plataforma Democrática, que reúne a la sociedad civil y a los partidos de oposición desde que se agravó la crisis a fines de 2003.
El obispo auxiliar de Puerto Príncipe, monseñor Pierre André Dumas, había exhortado durante una misa a los manifestantes a "no tener miedo" y les prometió la "victoria".
El país se encuentra en una crisis política desde las legislativas de mayo de 2000. El método de cálculo de los resultados de esos comicios aplicado por el partido Lavalas fue cuestionado por la oposición. Desde entonces la formación en el poder dispone de mayoría absoluta en el Senado y controla la Cámara de Diputados (83 bancas).
Desde el endurecimiento de la oposición contra Aristide, varios actos de violencia a veces mortales provocados por los partidarios del gobierno salpicaron el desarrollo de las manifestaciones.
Aristide presentó el lunes sus condolencias a las familias de uno de sus partidarios, muerto el domingo en Miragoane (suroeste), y de un alto funcionario policial, Edner Jeanty, asesinado el fin de semana último cerca de Cabo Haitiano (norte).
Se inició una investigación sobre la muerte de ese policía, quien había pasado muy rápidamente de simple agente a responsable departamental y que acababa de asumir su nuevo cargo.