Las participantes se someterán a operaciones para mejorar la nariz, el mentón, senos y nalgas.

Tener la nariz respingada, senos más grandes, nalgas levantadas, mentón firme, músculos sin flacidez y unos labios llamativos y carnosos, pueden constituir para una chica que concursa en un evento de belleza internacional una ventaja para llamar la atención y ser  aspirante al cetro.

Durante el concurso Miss Universo del 2001, la candidata Juliana Borges, entonces representante de Brasil, declaró abiertamente que se había sometido a 19 intervenciones quirúrgicas para “moldear” el cuerpo.

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La morena, que tenía 22 años, se había hecho una lipoescultura en casi todo el cuerpo, implante de siliconas en los pechos y glúteos, correcciones en las orejas, pómulos, nariz, mejillas, mandíbula y otras para remover marcas de nacimiento.

La Miss Ecuador 2003, Andrea Jácome, se hizo aumentar los senos y retocar la nariz. Ella consideraba que la medida de su busto no estaba acorde con lo que piden en un evento como Miss Universo, cuya talla ideal debe ser 90.

Cuando faltan menos de dos meses para elegir a la Miss Ecuador, las catorce participantes a la corona decidieron someterse a varias cirugías para moldear sus cuerpos, ya que la ganadora representará al país en el certamen internacional que por primera vez se realizará en Quito.

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Las cirugías son para aumentar el tamaño de los senos, mejorar el mentón y nariz, corregir orejas y eliminar esos “rollitos” que tengan en el abdomen o muslos.
Los trabajos estarán a cargo de los médicos de la fundación Estrella, que preside el cirujano Nelson Estrella.

A este grupo se suman cardiólogos y nutricionistas que asistirán a las jóvenes antes y después de las operaciones.

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La coordinadora del evento  Miss Ecuador, María del Carmen de Aguayo, resta importancia a las intervenciones quirúrgicas, pues destaca que todas tienen preparación y formación académica adecuada para representar al país. “Cada una  tiene su profesión, hablan varios idiomas, están especializadas en alguna área de lo que estudiaron, es decir,  están listas para competir en un torneo donde no solo se ve la belleza física”, recalca.

Nelson Estrella señala que las cirugías ayudarán a “moldear” sus cuerpos. “Por ejemplo, hay chicas que no tienen senos grandes y en un concurso internacional se pide que mida 90, entonces algunas se someten a un tratamiento especial para ganar talla”, dice el experto.

Recalca que no es trampa hacerse cirugías. “Hay intervenciones quirúrgicas en el pecho que no se notan; en un torneo miden el busto y no es permitido que las muchachas utilicen ropa que les aumente y eleve el tamaño de los senos”.