La empresa Brown & Williamson, fabricante de los cigarrillos Lucky Strike, deberá indemnizar con 20 millones de dólares, por daños punitivos, a Gladys Frankson, viuda de Harry Frankson, que falleció en 1999 de cáncer de pulmón.

Es la primera vez que un jurado del estado de Nueva York falla contra tabacaleras, por daños.