Hasta 1999 un coco se lo conseguía en 1.000 sucres, pero ahora cuesta 1 dólar (25.000 sucres).

Él compara la situación cuando en el país aún circulaba el sucre y dice que el agricultor está obligado a olvidar la moneda nacional.

Si acude a las tiendas y hace reflexionar al vendedor de lo que cuesta un dólar recibe como respuesta: “ya olvídese del sucre, ahora estamos con el dólar”.

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“La verdad es que con nuestra plata las cosas eran más baratas”, comenta Párraga.

Mañana 8 de enero se cumplen cuatro años desde que el gobierno del derrocado ex presidente Jamil Mahuad decretó el inicio del proceso de dolarización a una cotización  de 25.000 sucres por cada dólar.

La experiencia de Párraga de que todo se lo quieren vender en 1 dólar se da simultáneamente en el campo y en la ciudad.

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Andrés Navarrete es un joven de 21 años de edad que se demora 2 horas a lomo de caballo para salir desde el recinto La Fortuna hasta Colimes de Balzar.

Él toma las cosas con más calma y recuerda que aunque cuando comenzó la dolarización todo subió de precio, ahora la situación está más estable.

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En este cantón es difícil conseguir suelto para un billete denominado grande, como el de 20 dólares. Incluso los propietarios de los negocios medianos dicen que esos billetes casi no se ven por ese sector y por eso no tienen sueltos.