Su imagen con traje verde oliva dista de ser la de un jefe despiadado a quien se lo acusa de haber liderado el grupo guerrillero que dio muerte a Consuelo Araujonoguera, una ex ministra de su país, Colombia, y a la vez familiar de él, quien también enfrenta cargos de homicidio, terrorismo y secuestro. Además se lo considera el estratega financiero y uno de los intelectuales de las FARC.

Ricardo Palmera, detenido el pasado viernes en Quito, al integrar ese grupo subversivo, en 1987, adopta el nombre de Simón Trinidad. Era un millonario economista con un masterado en Harvard, casado y con dos hijos menores, amigo de influyentes personajes de su país, profesor universitario de economía y gerente regional de uno de los bancos de Colombia.

Este economista, afable, carismático y que afirma estar opuesto a la producción de la coca, abandonó su pasado, incluso a sus hijos, quienes por seguridad viven en Europa.
 
Un equipo de EL UNIVERSO lo entrevistó en febrero del 2000 en Los Pozos, un caserío sede de los diálogos de paz entre las FARC y el gobierno colombiano.

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Poco antes de la entrevista, un beso selló el reencuentro de él con su pareja en las FARC, Lucero, quien dejó el bachillerato para apoyar clandestinamente desde su barrio y colegio a este grupo y que luego se integró como guerrillera en el frente 41 (equivalente a un batallón). Ellos permanecían en distintos bloques (igual a una brigada).

Con Lucero, Trinidad tiene una hija de 11 años que se crió con su abuela materna (porque en la guerrilla está prohibido vivir con infantes). Ellas lo acompañaban en Quito.

Sobre el pasado y su vida como guerrillero basó el diálogo con este Diario. Los temas vinculados al Ecuador los respondió Joaquín Gómez, jefe del Bloque Sur de las FARC, que actúa cerca de la frontera con Ecuador.

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Pregunta: ¿Se proyecta con Lucero?
Respuesta: La veo en su trabajo con nuestro pueblo, en la lucha política, en la conducción del nuevo país que todos queremos, la desearía revolucionaria, como luchadora en una nueva vida.

P: ¿Por qué cambio su vida cómoda por las FARC?
R:Porque el mayor anhelo es lograr las profundas transformaciones que necesita el país mediante un acuerdo político o triunfando, llegando al poder por la vía revolucionaria.

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P: Las FARC son protagonistas del conflicto...
R: Los que ven de lejos la guerrilla la ven dura, adusta. Dadas las características de Colombia opté por la lucha armada. Hubiera seguido en la docencia, mi vocación.

P: ¿La añora?
R: Claro que sí, pero aquí tengo posibilidades de enseñar.

P: ¿Cómo cambio su vida?
R: La vida guerrillera es dura, difícil, pero uno se adapta y la prueba es que nosotros (los guerrilleros) de la ciudad no vemos extraña la actividad de sacrificio y lucha.

P: ¿Los años pueden hacer declinar esas posiciones?
R: En la guerrilla de las FARC hay guerrilleros de 70 años, 72 y 75 años, no se puede decir que se deja de luchar porque se tiene tantos años, no.

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P: ¿Su mayor objetivo?
R: Tener el cariño y el apoyo del pueblo, que sabe que nos sacrificamos y luchamos por él y estamos en su conducción para que juntos conquistemos una nueva Colombia. Mi mayor felicidad sería ver construida una nueva Colombia donde todos los niños y todos vivamos dignamente.