El gobierno de Ecuador anunció este lunes que  investigará el procedimiento en torno a la captura el viernes en Quito del  dirigente colombiano de las FARC Ricardo Palmera (alias Simón Trinidad ), tema  que originó una controversia con las autoridades de Colombia. 
 
El ministro de Gobierno ecuatoriano, Raúl Baca Carbo, reconoció que el  "problema fundamental es la información recibida", al referirse a las  contradicciones que generó la detención de uno de los líderes de las Fuerzas  Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas). 
 
Baca Carbo confirmó en declaraciones a telenoticieros la versión de la Policía de  Ecuador según la cual la captura se produjo en una operación de control  migratorio y de documentos realizada en una céntrica avenida de la capital.  Además, dijo no tener confirmación sobre una operación previamente planeada tal  como muestran videos de un seguimiento a Palmera en Quito, revelados por el  Ejército colombiano. 
 
"La contradicción me obliga a hacer todas las investigaciones del caso",  por lo que se pidió "la cinta para tener la constancia de que estamos hablando  de lo mismo", agregó. 
 
"La verdad debe primar y estamos intentando justamente mantenerla (...) no  conozco de autorización alguna entregada por el presidente de la República  (Lucio Gutiérrez) ni por el Ministerio de Gobierno que permita efectivamente la  acción de la Policía de Colombia en nuestro país, tal como ha sido señalado,  entre comillas, por medios colombianos", manifestó Baca Carbo. 
 
La colaboración internacional entre las policías del mundo "es lógica",  opinó. Sin embargo, llama la atención que "surjan contradicciones en temas tan  importantes como estos", dijo. 
 
Acerca del video indicó que "lo que no es admisible es que policías  externas caminen por el país haciendo precisamente este tipo de acto sin  conocimiento de las autoridades nacionales". 
 
Palmera "fue deportado por falta de decoumentación real y eso es lo que  cumplimos y eso es lo que tratamos de decirle al país y a Colombia", insistió. 
 
"No queremos de ninguna manera intervenir en los procesos internos de  Colombia, no tenemos necesidad de hacerlo, pedimos respeto a nuestra soberanía,  es importante", agregó.
De otro lado, aseguró que las autoridades de ambos países mantienen lazos  de colaboración para asegurar la vigilancia en la frontera común y subrayó que  la captura del líder guerrillero no debe ser interpretado como "una intención  de entrar en el conflicto de Colombia". 
 
"El problema está fundamentalmente en que esa colaboración podría dar lugar  a que se piense que nosotros tratamos de intervenir en procesos colombianos que  son propios de Colombia, esto no es así", expresó. 
 
La Policía ecuatoriana había explicado que Palmera ingresó al país por el  ecuatoriano Puerto El Carmen del Putumayo, fronterizo con la provincia nacional  de Sucumbíos y el departamento colombiano de Putumayo. 
 
Empero no precisó la fecha, pues Palmera no registró su entrada con ningún  nombre.