El matrimonio que Britney Spears contrajo hace dos días con un amigo de la infancia fue disuelto este lunes, a petición de la estrella de la música pop, quien adujo que no estaba en sus plenos cabales cuando siguió los impulsos de ese momento.

La jueza de familia en el Condado de Clark, Lisa M. Brown, firmó la orden para anular el matrimonio a las 12.24, dijo David Chesnoff, un abogado de las Vegas.

“Ya no hay matrimonio”, dijo Chesnoff. Explicó que el novio, Jason Allen Alexander,   accedió a eso totalmente.

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“Ellos han tomado una decisión sabia. Sé que ambos se aprecian mutuamente. Son amigos”, agregó el abogado.

A la jueza le llevó dos horas tomar la decisión sobre la   solicitud de anulación presentada ante la corte poco después de las 10h00.

Existen fundamentos para que este tribunal conceda la anulación (...) porque la demandante Spears no podía entender sus acciones al punto de que fue incapaz de convenir el casamiento, señalaba la petición a nombre de la cantante.

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Spears, de 22 años, se casó con Jason Allen Alexander, oriundo del estado de Luisiana, el sábado a las 5.30 de la mañana, en una capilla de Las Vegas.

Alexander dijo el lunes que lo que hicieron fue una locura que se les ocurrió a ambos para divertirse.

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“Fue una locura, expresó el joven de 22 años en una entrevista que concedió desde su casa a   Access Hollywood, el lunes.   Nos estábamos mirando y dijimos: Vamos a hacer algo disparatado, loco. Vamos a casarnos, sólo para divertirnos un rato”, manifestó Alexander.

“El sello discográfico de Spears (...) la cantante y su amigo   llevaron una broma demasiado lejos al casarse el sábado”, expresó Jive Records.

Los representantes de Spears no han respondido hasta ahora las llamadas efectuadas para que realicen comentarios.

La cantante lanzó en noviembre su cuarto álbum,   In the Zone, que debutó en los primeros lugares de popularidad. Tiene previsto comenzar con una gira de conciertos el 2 de marzo, en San Diego.

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