Con escobas, rastrillos y fundas de basura, los 925 vendedores minoristas de Salinas iniciaron ayer su jornada de limpieza a las playas de la ciudad, pero  recién al mediodía  el recolector de basura  recogió los desperdicios del pasado 31 diciembre.

El personal pertenece a las diferentes asociaciones de comerciantes minoristas, entre ellos están los artesanos, los que alquilan parasoles y los vendedores de comidas y bebidas en la zona.

El Municipio y la Capitanía del Puerto son los encargados del control. Ellos dan la capacitación y dotan de las fundas de basura.

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La minga se dividió en dos grupos: uno para la playa de San Lorenzo y el otro para Chipipe. Los dos equipos trabajan de manera independiente. Luis Eduardo Murillo, presidente de la asociación Playa, Mar y Sol,  fue el delegado para llevar el control correspondiente solo en San Lorenzo.

Indicó que la revisión se la realiza diariamente con  el fin el convocar a reunión en caso de que la playa esté sucia,  “cada dos días se limpia la zona, en caso de feriados, todos los días, trabajamos de acuerdo a la afluencia de turistas”.

A partir de las 08h00 el primer grupo, que contaba con 18 asociaciones, empezó desde el hotel Colón hasta el área de las palmeras, al final del sector de San Lorenzo.

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Ellos formando una hilera se dispusieron a recoger todo tipo de basura en la zona. El objetivo,  mantener la playa limpia.

En cambio, el segundo grupo inició a las 05h00 hasta las 07h00, desde el Yacht Club hasta la Base Naval Sur. Aquí estuvieron presentes 400 personas que pertenecen a la Asociación Chipipe y Horizonte.

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Ellos trabajan todos los lunes, miércoles y viernes, pero ahora se extienden hasta el domingo cuando termina el feriado.

Por la ausencia de los recolectores de basura, el vicepresidente de la asociación Chipipe, Cris Santos, afirmó que alquilaron una camioneta para que se lleven recogidos los desechos.