Según familiares de las víctimas, el licor, las rivalidades y la delincuencia causaron la muerte de estas personas.

Doce personas fallecieron en la provincia del Guayas a causa de la criminalidad desatada los dos primeros días del año nuevo.

La última vez que Enma Castillo vio a su hermano Carlos, de 30 años, fue cuando le deseó buena suerte para el nuevo año, a las 18h30 del jueves pasado. Media hora después, Carlos Castillo Manzano, padre de tres hijos, apareció muerto, con la huella de un disparo en el tórax, en el céntrico sector de las calles Padre Aguirre y General Córdova.

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Sus pertenencias estaban intactas, por lo que la familia presume que no fue asaltado. Diferente fue el caso de César Torres Arreaga, de 44 años, quien murió a las 00h15 de ayer, luego de que hampones lo apuñalaran en el tórax.

Según sus familiares, Torres, propietario de una despensa en la ciudadela María Piedad, del cantón Durán, se negó a vender licor a dos sujetos, quienes regresaron a los pocos minutos para robar en el local de Torres y asesinarlo.

Cuatro horas después, un sujeto armado y con el rostro cubierto, ingresó a una vivienda de Flor de Bastión, donde dormían Luis Vacancela Comispoma, de 24 años, y su esposa, Carmen Copa, de 20.

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“Le dije a mi esposo que un ladrón había entrado por la ventana y él se levantó. Cuando el tipo lo vio, le disparó en el pecho”, relató Copa.

A las 07h15 de ayer, Marcelo Moreno Pardo, de 23 años, y su hermano Marco, de 20, se dirigían a su trabajo en dos bicicletas, en el kilómetro 15 de la vía a Samborondón.

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Marco Moreno relató a su madre que un sujeto identificado como Jimmy L., los interceptó y le disparó en la espalda a Marcelo, padre de dos niños menores de 4 años.

Marco dijo que mientras huía, logró ver al supuesto asesino avanzar hasta donde estaba su hermano herido, y dispararle nuevamente en la cabeza y en los brazos.

La Policía reportó además que entre las 11h30 y las 13h30 del jueves, el mecánico Jorge Caimache Santos, de 26 años, murió tras recibir una puñalada en el tórax y el comerciante Eduardo Segura Quinto, de 42 años, falleció por las múltiples puñaladas que recibió en varias partes del cuerpo.

El chofer Luis Chango Cabrera, de 30 años, murió en el hospital Guayaquil la tarde del jueves pasado debido a la herida de arma de fuego que recibió en el ojo derecho.

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Un disparo en el pecho le ocasionó la muerte a Carlos Vásquez Bravo, de 25 años, a las 00h15 de ayer, en la ciudadela Nueva Prosperina, al noroeste de Guayaquil.

Con heridas de arma blanca en el rostro, cuello, cabeza y abdomen fueron asesinadas en Naranjal, Plácida Graciela Correa Molina, de 53 años, y su hija Plácida Josefina Correa Molina, de 16 (mismos apellidos). La Policía de ese cantón también reportó el crimen de Patricio Almeida, de 30 años.

592 HOMICIDIOS
Se cometieron en la provincia del Guayas durante el 2003, según las estadísticas de la Policía. Las cifras revelan también que apenas 57 personas están detenidas por estas causas.

66 CRÍMENES
Muestra diciembre del 2003, lo que constituye el mes de mayor violencia. Le siguen en ese orden, noviembre con 61, mayo con 57, agosto y octubre con 54; septiembre, 50; junio registra 48 y los otros con índice menor.

3.026 DENUNCIAS
Por agresiones físicas se registraron en el 2003 según la Policía Judicial. La cifra más alta fue en abril pasado con 320. Diciembre cerró con 213.