El brasileño Marílson Gomes dos Santos rompió  ayer la larga hegemonía de fondistas de Kenia en la tradicional corrida de San Silvestre, que se disputa anualmente en las calles de Sao Paulo, y se impuso en 43 minutos y 48 segundos.

La fondista keniana Margareth Okayo dominó a voluntad la prueba femenina y ganó con un tiempo de 51 minutos y 23 segundos.