Los restos de Mónica Patricia Terán Navarrete, víctima ayer miércoles del ataque perpetrado por un camionero palestino residente en Jordania en un paso fronterizo con Israel, serán trasladados a Quito dentro de las próximas 48 horas.
 
"Estamos haciendo los contactos con las autoridades policiales y confío en que mañana viernes serán transportados", dijo hoy jueves a EFE el embajador de Ecuador, Francisco Riofrío.
 
Mónica, de 33 años, formaba parte de un grupo de 29 peregrinos y turistas ecuatorianos atacados por Ahmed Yahid, de 37 años, cuando aguardaban cerca del control de pasaportes por las autoridades israelíes en ese punto de la frontera donde, en 1994, se firmó el acuerdo de paz entre Israel y el vecino Reino de Jordania.
 
El embajador informó de que los padres de la víctima autorizaron la autopsia del cadáver de su hija con el fin de acelerar los trámites. "Confío en que mañana podremos repatriar los restos", indicó.
 
"La aerolínea Iberia nos ofreció un trato preferencial e inmediato" para el traslado de los restos y su entierro en Ecuador, puntualizó Riofrío.
 
Representantes del Ejército, la Policía y los organismos secretos del dispositivo de seguridad de Israel se reunían hoy para analizar la investigación sobre el ataque, sin precedentes en ese paso.
 
Fuentes militares citadas hoy por la prensa local afirmaron que los encargados de la seguridad se comportaron negligentemente y que no hay certeza de que los camiones jordanos que cruzaron la frontera hubiesen sido inspeccionados.
 
El atacante, residente en la ciudad jordana de Zarka, conducía un camión con ganado y fue abatido por un agente de seguridad. Los disparos contra los ecuatorianos los efectuó con un arma automática que llevaba envuelta en una manta, se informó.
 
Otros cuatro excursionistas resultaron heridos, uno de ellos de consideración, y seguían hoy en el hospital Ioseftal de la ciudad israelí de Eilat.
 
Las víctimas, que llegaban desde las ruinas de la antigua ciudad nabatea de Petra, en el sur de Jordania, tenían previsto seguir viaje hoy al desierto egipcio de Sinaí para visitar el monasterio de Santa Catalina, y después dirigirse hacia El Cairo.
 
Un funcionario destacado de la seguridad israelí, citado hoy por el diario "The Jerusalem Post", que no lo identifica, dijo que el ataque "lleva la marca" de los militantes de la organización islámica Al Qaeda, pero las autoridades jordanas creen que "se trata de un "acto individual llevado a cabo por un único pistolero".
 
"Nosotros no tenemos elementos de juicio como para atribuir el ataque a ninguna organización", dijo el embajador Riofrío.
 
Hasta el momento ninguna facción se ha adjudicado el ataque en el paso fronterizo, que lleva el nombre del asesinado primer ministro israelí Isaac Rabin y está cerca de la ciudad turística de Eilat.