La situación del mercado laboral en los países industrializados podría mejorar el año próximo gracias a la recuperación económica de Estados Unidos, afirma la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en su informe sobre el mercado de trabajo para 2004, difundido este miércoles en París.
 
El escrito señala que las reformas estructurales implementadas en América del Norte, la Unión Europea, Australia y Nueva Zelanda frenaron el aumento del desempleo en la actual coyuntura económica, menor al registrado en crisis anteriores.
 
Sin embargo, la OCDE había pronosticado anteriormente una mejora del mercado de trabajo para este año.
 
La organización advierte que, si no se toman medidas, el crecimiento anual de la población en condiciones de trabajar se reducirá del 1,3% (promedio de los últimos 30 años) al 0,3%. En países como Japón o Italia, la población económicamente activa incluso disminuiría en términos absolutos.
 
Además, subraya que a los números actuales de desempleo deben sumarse las personas que se han retirado del mercado de trabajo, pero aún están interesadas en conseguir un empleo. El principal estímulo para que reanuden la búsqueda activa es asegurar que el trabajo signifique una recompensa financiera.
 
También han demostrado su efectividad las ventajas impositivas concedidas por el Estado a las empresas que contratan más personal, apunta la OCDE.