Ruso Yuri Malenchenko contraerá nupcias con Ekaterina Dmitrieva, quien estará en la Tierra.

Puede ser un gran paso para marido y mujer, pero para Rusia es uno que va demasiado lejos.

Mañana, Yuri Malenchenko, comandante de la Estación Espacial Internacional (EEI), será el primer hombre que se casará en el espacio.

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Rusia informó ayer que la planificación había sido tan complicada, que nunca más permitirá que sus astronautas lo hagan de nuevo.

“Creo que haremos que la próxima tripulación firme un contrato con la provisión de que no contraerán matrimonio durante su misión”, dijo Sergei Gorbunov, portavoz de la agencia espacial rusa.

“Esto ha sido una cadena extraña de eventos”, agregó.

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Malenchenko, de 41 años, se casará con la estadounidense Ekaterina Dmitrieva, de 26, y el intercambio de votos se realizará vía telefónica desde el espacio a Houston, sede del centro de control de la misión en Estados Unidos, y donde reside la novia.

La pareja, mitad cósmica, estará separada verticalmente por 380 kilómetros, en la primera boda que se realizará en parte más allá de la atmósfera de la Tierra.

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A pesar de los dolores de cabeza que esto ha representado para la agencia espacial rusa, la boda ha despertado el orgullo nacional.

“Yuri Gagarin fue el primero en ir al espacio. Tuvimos a la primera mujer en el espacio. Tuvimos al primer turista en el espacio. Y ahora la primera boda”, señaló Gorbunov.

Dmitrieva, que abandonó la desaparecida URSS cuando tenía 4 años, negoció la exclusiva de la retransmisión de la ceremonia con una gran cadena de televisión estadounidense, mientras que el enlace, que tendrá un coste estimado entre 8.000 y 10.000 dólares y una duración de unos 10 minutos, no les costará nada, ya que los cosmonautas tienen derecho a comunicarse desde la EEI con sus allegados.

En junio pasado, una nave de abastecimiento Progress le hizo llegar a Yuri el traje de boda, así como la alianza y la autorización de casarse a distancia, concedida por el distrito de Fort Bend en Texas, donde vive su prometida.

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Yuri, divorciado no hace mucho, pidió la mano de Ekaterina en diciembre pasado antes de salir al espacio en abril con el astronauta norteamericano Edward Lu.

El casamiento en la iglesia está previsto en Rusia y la luna de miel en Australia.