Una portavoz de la empresa, Christa Carone, sin embargo, no quiso contestar a la información publicada por el diario The Wall Street Journal que cuantificó esta cantidad de ingresos no contabilizados adecuadamente en más de 6.000 millones de dólares, que, al parecer, tendrían relación principalmente con su filial en Brasil.
La Comisión del Mercado de Valores de EEUU (SEC, siglas en inglés) estimó en abril que la cifra sería de unos 3.000 millones para el período comprendido entre 1997 y 2000, y, según el diario, incluyendo el 2001, ascendería a los 6.000 millones.
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Inmediatamente, las autoridades reguladoras de Wall Street suspendieron la cotización del valor, que el jueves cerró a ocho dólares por debajo de su máximo de 11. En el mercado bursátil privado Instinet perdían 2,39 dólares (30 por ciento) a 5,61.
"Al producirse poco después del caso WorldCom ha tocado un nervio muy sensible", resaltó Helen Rodríguez, jefa de la división europea de Investigación de Deutsche Bank, quien admitió que en cierto grado es una noticia que conocía desde hace un tiempo.
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En una entrevista con la cadena de información financiera CNNfn, Carone aseguró que la empresa modificará los ingresos de los últimos ejercicios pero señaló que se acercará a los 2.000 millones de dólares, o un dos por ciento de los ingresos de esos cinco años.
Carone mostró, asimismo, su convicción de que la empresa enviará las cuentas revisadas de esos años a la SEC "muy pronto", y utilizará las nuevas normas para el ejercicio del 2001 y el 2002.
Según The Wall Street Journal, el descubrimiento se habría producido en el transcurso de una auditoría iniciada por la propia compañía a instancias de las autoridades bursátiles estadounidenses, en la que se halló más irregularidades contables de las conocidas.
La SEC multó a Xerox con el récord de 10 millones de dólares hace unos meses cuando confirmó sus irregularidades contables, y ordenó a sus directivos que enviaran unas cuentas corregidas en junio.
Los problemas, explicó entonces, se produjeron por no contabilizar adecuadamente ingresos antes de impuestos de equipamiento alquilado con opción de compra (leases) en Europa, América Latina y Canadá, entre otras cosas.
La disputa se refiere a si es legal o no reconocer totalmente de una vez ingresos y beneficios realizadas por operaciones de lease, en vez de realizarlo a lo largo de la vida de este contrato.
Carone no quiso contestar "a ninguna especulación" sobre posibles nuevas irregularidades, aunque aseguró que el asunto solamente refiere a cuándo y cómo fueron contabilizados los ingresos. "No hay fraude o transacciones ficticias", resaltó.
La semana pasada, Xerox completó la renegociación de una línea de crédito de 7.000 millones de dólares para poder cancelar un crédito de 2.800 millones. También ha recibido 2.300 millones de nueva financiación de General Electric Capital desde noviembre.
La noticia sobre Xerox tuvo hoy aún más resonancia al producirse tres días después de que la operadora telefónica WorldCom, la segunda de larga distancia más grande de EEUU, reconociera un fraude de 3.800 millones de dólares al contabilizar gastos operativos como gastos de capital durante el último año y medio.
Si las autoridades y los bancos acreedores no lo remedian, WorldCom podría convertirse en la mayor quiebra de una empresa en Estados Unidos, superando a la eléctrica Enron. Worldcom acumula una deuda cercana a los 33.000 millones de dólares.