Ni Zinedine Zidane, estrella del fútbol francés, salvó al campeón del Mundo de su eliminación en la primera ronda del Mundial Corea / Japón 2002. Con un punto, 0 goles y -3 de gol diferencia los franceses se despiden eliminados, por primera vez en más de un cuarto de siglo en la primera ronda de una Copa Mundial.

Dennis Rommedahl puso en ventaja a Dinamarca a los 22 minutos y Jon Dahl Tomasson selló el fin del reinado de Francia a los 67 con su cuarto gol en el torneo.

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Dinamarca terminó primera en el Grupo A con 7 puntos, seguida por Senegal con 4. Uruguay y Francia quedaron eliminados, los primeros con dos puntos y los galos con uno. En partido simultáneo, Senegal igualó 3-3 con Uruguay.

Nunca desde el drama de Brasil y la lesión de Pelé en 1966 en Inglaterra, un ex campeón mundial había dejado de avanzar a la siguiente ronda.

Francia se va no sólo abandonando el título conquistado en casa en 1998, sino también sin haber marcado un solo gol en sus tres partidos.

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Las características del juego quedaron planteadas tempranamente: Francia, con Zinedine Zidane de vuelta después de una ausencia de dos partidos, comenzó a atacar con todo, mientras Dinamarca esperaba con una defensa bien plantada, marcaba ordenadamente desde la salida del mediocampo y ensayaba bien hilvanados contragolpes.

Zidane, jugando con una venda elástica en el muslo izquierdo recuperado de una lesión, realizó algunas jugadas brillantes de su sello, pero sólo de manera esporádica. Aunque no tuvo marca personal, pareció lento, impreciso en algunos pases, y jugando demasiado retrasado.

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Silvayne Wiltord, el hombre más peligroso e insistente de los campeones mundiales, exigió un par de veces al arquero Thomas Sorensen, que respondió con acierto, lo mismo que ante un cabezazo de David Trezeguet, abajo y a un rincón, que parecía llevar destino a la red.

Fue casi todo lo realmente peligroso de Francia, más una entrada de Zidane que tropezó y cayó a último momento, cuando corría en procura de un balón dentro del área.

Dinamarca se adelantó en la culminación de un contragolpe. Rommedahl recibió desmarcado por la izquierda un cruce sobre el área de Stig Toeftig, y conectó un tiro cruzado que hizo estéril el vuelo del arquero Fabien Barthez.

Francia volvió con los mismos ímpetus pero con más orden, y Marcel Desailly estuvo a punto de anotar el empate pero su cabezazo se estrelló en el horizontal.

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En la réplica, Barthez sacó de un manotazo un tiro a boca de jarro de Rommedahl.

Cuando Francia dominaba y su presión crecía, Thomasson coronó un contragolpe anotando frente a la salida de Barthez. Thomasson quedó compartiendo el primer lugar de la tabla de artilleros con el alemán Miroslav Klose.

La sólida defensa danesa, comandada por Tofting, resultaba una barrera infranqueable para Francia, que buscó de todas maneras, con tiros de distancia que Sorensen neutralizó una y otra vez, con centros sobre el área desde los costados y con paredes por el medio.

El gol merodeaba la valla danesa, cuando Trezeguet estrelló nuevamente un tiro en el horizontal.