Un estudio científico reciente demostró que ciertos reguladores genéticos en el cerebro, denominados micro RNA ( ácido nucleico formado por una cadena de ribonucleótidos) juegan un papel clave en la ansiedad y se ven afectados por las bacterias en el intestino. 

Así lo determinó un equipo de expertos de la Universidad de Cork, en Irlanda, durante un trabajo que forma parte de un creciente conjunto de datos sobre las bacterias intestinales y la salud física y mental.

Los especialistas usaron ratones de prueba y descubrieron que los micro RNA cambiaron en el cerebro de los roedores libres de microbios, criados en una burbuja libre de gérmenes. “Los ratones mostraron ansiedad anormal, déficit de sociabilidad y cognición, y comportamientos depresivos”, señalaron los especialistas.

Publicidad

Los microbios intestinales parecen influir en LOS micro RNA en dos partes específicas del cerebro: la amígdala, que comúnmente se asocia con experimentar emociones, y la corteza prefrontal, importante en el desarrollo de la personalidad.

Aunque aún es temprano, los científicos ven la posibilidad de lograr un impacto en los micro ARN en regiones cerebrales específicas dirigiéndose a la microbiota intestinal. (F)