Despertar el interés sobre aspectos científicos, en especial en los jóvenes estudiantes, es uno de los objetivos que tendrá la presencia del Túnel de la ciencia, en Quito, museo itinerante creado por la afamada Sociedad Max Planck de Alemania y cuyo propósito es explicar múltiples preguntas como el origen del universo.

El museo estará en la Casa de la Cultura Ecuatoriana entre el 22 de junio y el 21 de agosto. Allí los asistentes también podrán ver exposiciones, salas de películas, clips animados, tocar muestras de meteoritos, mirar su cuerpo en 3D para entender dónde está cada órgano y cómo funciona cada uno.

Los expositores liberarán algunas dudas. “El comprender situaciones que siempre fueron incógnitas provoca emociones, y si eso se produce en los estudiantes podría llevarles a interesarse por seguir una carrera científica como la ingeniería, la física, la química pura o alguna otra. Si se logra aquello, habrá generación de nuevos conocimientos y eso se transformará en tecnologías para mejorar la calidad de vida de la sociedad”, explicó Alberto Celi, vicerrector de investigación y proyección social de la Escuela Politécnica Nacional, uno de los entes patrocinadores de la venida del museo.

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Sertecpet es una de las empresas auspiciantes del evento y, desde su condición de ser una industria energética ecuatoriana, su representante Bernardo Traversari elogió la realización de este tipo de iniciativas que generarán la competitividad en la sociedad.

El Túnel de la ciencia llega al Ecuador luego de recorrer varios países como Perú, México, Colombia y Argentina. En 12 años, más de nueve millones de personas han visitado este espacio interactivo. Entre las actividades que se harán en este museo está una iniciativa que consiste en que los visitantes podrán enviar su nombre al planeta Marte, indicó Celi. (I)