Msc. Rafael Montalván
Especialista en lengua y literatura

Hacer una labor que quede para las actuales y las próximas generaciones, fue la respuesta de Édgar Allan García cuando le escribimos que la lectura estaba en buenas manos, a propósito del encargo que le hiciera el Ministro de Cultura para que dirija el Plan Nacional de Promoción del Libro y la Lectura en el Ecuador.

Escritor prolífico (cuento, ensayo, poesía,…) y experto en la temática de la redacción creativa, la edición de textos, la didáctica y el comentario crítico, Édgar Allan García (Guayaquil, 1958) se constituye en una garantía para poner en marcha el plan desde una perspectiva territorial para democratizar la cultura y para vengar al ciudadano lector que no tuvo espacio en la década ganada y porque antes de ella el Estado auspició una campaña de lectura que terminó siendo privada para el ego de un personaje taimado que desde entonces resolvió su vida. Durante cinco años desde esta columna hemos animado los procesos, iniciativas, proyectos, investigaciones, didácticas y demás afines del libro, de los autores y de la lectura. También de la escritura: con ponencias propias en el congreso cátedra Unesco (Costa Rica, 2016) y en el Pedagogía (Cuba, 2017) hemos demostrado que la mejor forma de leer es escribir. La lectura debe provocar escritura.

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Édgar Allan García tiene mucho que contribuir en el ámbito de la capacitación y de la inserción de las tecnologías de la información y la comunicación para potenciar el plan. Desde esta columna apoyamos su labor. (O)