Dios ama a los niños y los mantiene saludables, protegidos y seguros.

Bendición para los niños
Los niños son bendiciones divinas —inocentes y receptivos a las maravillas del mundo. Cuando sé sobre un niño que está extraviado, enfermo o con miedo, inmediatamente oro. Visualizo que el amor de Dios lo envuelve, que el Espíritu divino lo protege y consuela, que está seguro y que es sano. Mis oraciones y pensamientos positivos me ayudan a centrar mi atención en cómo puedo ayudar al niño y a su familia. Tengo fe en que cada niño es saludable y está a salvo, que cada persona que cuida de él tiene las herramientas y oportunidades necesarias para asegurar buenos resultados. Hoy oro por los niños afirmando para cada uno: Eres una creación amada de Dios, saludable, segura y protegida.

1 Juan 4:4
Hijitos, ustedes son de Dios, y han vencido a esos falsos profetas, porque mayor es el que está en ustedes que el que está en el mundo. (F)