De acuerdo a un estudio realizado por la universidad australiana Deakin, la dieta mediterránea, conocida por mejorar la salud cardiovascular, reducir los riesgos de la diabetes y aumentar la longevidad, también puede ayudar a combatir la depresión severa.

El consumo de grandes cantidades de frutas, verduras, aceite de oliva, frijoles y cereales como trigo y el arroz, así como cantidades moderadas de pescado, productos lácteos y vino, son parte de las características de esta llamada dieta mediterránea. (F)