Poeta, ensayista, novelista, guionista de cine, dramaturgo, pintor y crítico de arte, un hombre polifacético. Así era John Berger, cuya obra titulada Modo de ver (Ways of Seeing) se convirtió en un texto de referencia para los historiadores del arte.

El escritor y crítico británico falleció ayer, a los 90 años de edad. “Murió en casa rodeado por los suyos”, dijo su hijo, Jacob Berger, a la AFP. El escritor vivía desde hace unos años en Antony, una localidad próxima a París, tras haber residido durante mucho tiempo en Quincy, este de Francia.

Berger nació en Londres en 1926. En la Segunda Guerra Mundial se alistó en el ejército y al acabar la contienda retomó sus estudios de arte en la Escuela de Arte de Chelsea, en Londres. Ya licenciado, dio clases de dibujo, pintó y empezó una década de colaboraciones como crítico en la revista New Statesman.

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En 1958 publicó su primera novela, Un pintor de nuestro tiempo, y en 1972 Modo de ver, un análisis del estudio de las imágenes y la perspectiva. El libro se acompañó de un documental de varios capítulos que presentó en la televisión BBC.

“Nunca se ha establecido la relación entre lo que vemos y lo que sabemos. Todas las tardes vemos ponerse el sol. Sabemos que la tierra gira alrededor de él. Sin embargo, el conocimiento, la explicación, nunca se adecúa completamente a la visión”, escribió en aquel ensayo.

En 1972 ganó el más prestigioso de los premios británicos de ficción, el Booker Prize, por su novela picaresca G. y donó la mitad del premio a las Panteras Negras, la organización que luchaba contra la discriminación de los negros.

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Además de novelas y ensayos, escribió guiones cinematográficos –en especial para el director suizo Alain Tanner– y poesía. Era parte de la Academia de las Artes de Berlín.

Berger era un izquierdista que se mudó a Francia en los años 1970 precisamente porque la veía más proclive a su ideología, explicó su hijo Jacob. “Era amigo del Subcomandante Marcos, era amigo del pueblo palestino, un hombre que toda su vida se negó a poner los pies en Estados Unidos, pero que fue a México a conocer a Marcos”, narró .

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“Mantenía una posición política muy fuerte, pero no era un comunista estrecho de miras y dogmático”, añadió. Según efectococuyo.com, John Berger demostró que el pensamiento marxista seguía siendo útil como herramienta para el análisis cultural.

El cuaderno de Bento, Siempre bienvenidos, Hacia la boda, Puerca tierra y Una vez en Europa también figuran entre las obras de Berger. Incluso escribió un artículo llamado En defensa del pueblo palestino junto con Noam Chomsky, Harold Pinter y José Saramago. (I)