La reina Isabel II, de 90 años, se perdió este domingo la tradicional misa navideña con la familia real británica por primera vez en décadas debido a un fuerte resfrío y en su mensaje por la fecha se refirió a ejemplos inspiradores de “personas comunes que hacen cosas extraordinarias”.

Su esposo, el príncipe Felipe, de 95 años, también sufría de un fuerte resfriado, dijo el Palacio de Buckingham, pero asistió a la misa y no necesitó de ayuda para ingresar a la iglesia, de acuerdo con un fotógrafo de Reuters.

Isabel, la monarca con el reinado más largo del mundo, ha participado en el servicio navideño en la iglesia de Santa María Magdalena, en la localidad de Sandringham, todos los años desde 1988.

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Antes de esa fecha, la familia real pasaba Navidad en Windsor.

En un mensaje grabado para Navidad, la reina mencionó el ejemplo de Jesús y citó las palabras de la Madre Teresa para elogiar a quienes, dijo, hacían pequeñas cosas con amor.

“No todos nosotros podemos hacer grandes cosas. Pero podemos hacer pequeñas cosas con mucho amor”, dijo Isabel, líder de la Iglesia de Inglaterra. “Es comprensible que a veces pensemos que los problemas del mundo son tan grandes que podemos hacer poco para ayudar”, agregó.

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“En solitario, no podemos terminar con las guerras o con la injusticia, pero el impacto acumulado de miles de pequeños actos de bondad puede ser mayor de lo que imaginamos”, concluyó. (I)