El cáncer de hígado se trata de la destrucción de las célula hepáticas como consecuencia de algún factor de riesgo o la suma de estos, de los cuales el de mayor afectación “es la infección por hepatitis, que tiene varias clases, pero las que más se correlacionan con el cáncer la hepatitis B y la C, ambas son de origen viral”, explica Jorge Moncayo, oncólogo clínico.

Esta enfermedad crónica, agrega, sin el debido control o tratamiento, con el paso del tiempo puede llegar a convertirse en una cirrosis hepática y posteriormente está la posibilidad de que desarrolle un hepatocarcinoma.

El galeno destaca la evolución de estas complicaciones, que generalmente no presenta síntomas, excepto cuando llega a un estado avanzado.

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Otro de los factores de riesgo que originan un hígado graso, en primera instancia, está el consumo de grasas en exceso y también de alcohol. Por eso recomienda un control periódico, sobre todo si la persona presenta alguno de dichos antecedentes y así evitar llegar al cáncer de hígado. (F)