Decenas de piezas de oro y otros metales fueron decomisadas por la Policía y la Fiscalía en Esmeraldas.

Son objetos arqueológicos extraídos clandestinamente de sitios denominados como huacas, lugares ancestrales que funcionaban como santuarios, templos, entierros, construcciones sagradas de sociedades milenarias.

“Estos objetos por lo general se encontraban debajo de la tierra. Entonces tenemos la seguridad de la extracción clandestina de estos bienes. Pues ahora se constituye en un delito que estamos investigando”, dijo un agente de la Policía Judicial a Ecuavisa.

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Aproximadamente 170 piezas fueron recuperadas. Varias de ellas tienen formas de animales; otras, de máscaras.

El fiscal Hugo Pérez, de la Unidad de Delitos Flagrantes de Quito, informó que los objetos están compuestos “de oro con aliación de plata y cobre” y que “preliminarmente el Instituto de Patrimonio Cultural determinó (que tienen) una edad de entre 3 mil y 4 mil años”.

Simultáneamente se ejecutaron operativos en Quito y Latacunga. En estas acciones se aprehendió a dos personas sospechosas de la posible venta ilegal. El Código Integral Penal tipifica a esta actividad como comercialización ilícita de patrimonio cultural; establece penas de hasta siete años. (I)