Medicina tradicional, esculturas, vestimenta, artesanías y danzas fueron parte de la Segunda Feria Turística, Cultural, Artesanal y Gastronómica organizada por el Consorcio de Municipios Amazónicos y Galápagos (Comaga), que se desarrolló el fin de semana último en el Centro de Exposiciones Quito, en la av. Amazonas.

En el estand del cantón Putumayo, provincia de Sucumbíos, se mostró al bejuco de rana como una opción medicinal. El expositor Fredi Dagua explicó que esta planta actúa como un energizante para el cansancio, el malestar y la gastritis. Dagua detalló que se la corta en tajos y se la hierve en tres litros de agua entre 10 y 20 minutos hasta que se obtiene el zumo.

Tzanken Aranda, de la etnia shiwiar, de la provincia de Pastaza, expuso esculturas de animales del Oriente, como caimanes, anacondas, monos, papagayos y jaguares. Además, artesanías autóctonas de cerámica como las mocahuas (jarrones para beber), hechas a base de barro de la Amazonía. Este pueblo ancestral talla las esculturas en madera.

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Paulina Pillaguaje, de la nacionalidad Secoya, mostró la naturaleza de la selva a través de pinturas. Una de sus obras representaba con nitidez –por la variedad de tonos– las orillas de las lagunas de Limoncocha y del Cuyabeno, Sucumbíos.

La gastronomía local también fue otro atractivo para cientos de visitantes que tuvo esta feria intercultural.

Flora Chongo, de la provincia de Napo, vendió el tradicional maito que se degusta en su provincia. Ella explicó que se trata de tilapia con yuca ahumada, envuelta en palmito de chonta, ensalada y guayusa. Todos estos alimentos en un plato que costó 6 dólares.

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En esta feria también hubo espacio para la comida nativa. En el estand de Zamora Chinchipe se ofrecieron platos de ancas de rana brosterizadas, por 10 dólares. La carne cocinada del anfibio se la acompañó con chifles, arroz, ensalada. Wendy Santín, dependiente de este puesto, indicó que en esta provincia hay criaderos y que incluso este producto se lo exporta a Europa.

Unos comensales contaron que la carne de este batracio tiene un sabor similar al pollo. Otros dijeron que les supo un poco a pescado.

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Santín explicó que en unos dos meses la rana está lista para ser consumida y que durante su desarrollo, el animal es alimentada con balanceado.

Otro de los estands más visitados fue el de los helados artesanales. Stalin Guevara tenía una oferta variada de sabores, entre estos: yuca, camote, remolacha, zapallo, zanahoria blanca y amarilla.

Guevara señaló que son sabores que han tenido bastante acogida en la ciudad de Baños, en Tungurahua (en la Sierra), donde tiene su negocio.

El acto tuvo el objetivo de consolidar la actividad turística y cultural de los 46 municipios que conforman el Comaga, distribuidos en la Amazonía, Galápagos, Baños y Penipe. (F)

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