En diez años Xavier Dolan se ha hecho un nombre entre los más grandes del séptimo arte. A sus 27 años el canadiense, considerado un director superdotado, obtuvo el Gran Premio del Festival de Cannes el pasado domingo por Juste la fin du monde (Solo es el fin del mundo).

No es la primera vez que Cannes lo reconoce, pero sí la primera que logra lo más cercano a la Palma de Oro.

Dolan es un asiduo visitante del festival y solo se perdió dos ediciones de las últimas ocho, en 2011 y 2013. “Hace dos años viví un momento determinante y este es otro momento que cambiará mi existencia”, dijo al recibir el Gran Premio. En el 2014 obtuvo el Premio del Jurado, por Mommy, compartido con el director francés Jean-Luc Godard.

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Los 27 años de Dolan pueden parecer pocos, pero en el cine tiene un camino recorrido y un nexo ya añoso con Cannes, según reseñas internacionales. A los 20, su primer largometraje, J’ai tué ma mère (Yo maté a mi madre) fue presentado en la Quincena de Realizadores. Se llevó tres premios. El año siguiente recibió el galardón Juventud por Los amores imaginarios.

Dolan nació en Quebec, Canadá, en 1989, comenzó su carrera como actor cuando tenía 4 años. Protagonizó las primeras dos películas que dirigió. Hoy suma seis y está empezando su séptima cinta, la primera en lengua inglesa, The death and live of Jonathan F. Donovan, que se estrenaría en 2017.

Un video de seis minutos de duración acercó recientemente a Dolan a la cultura popular. Él dirige el video Hello de la cantante Adele que ya ha sido visto 1.500 millones de veces.

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“Haré películas toda mi vida, me quieran o no”, expresó entre lágrimas el pasado domingo en el Festival de Cannes. Él sabía bien a lo que se refería, pues la polémica lo acompaña desde su primer largometraje, J’ai tué ma mère, un filme de carácter autobiográfico en el que un adolescente homosexual sostiene una relación tormentosa con su madre, resume la revista Código.

El director, tildado de arrogante, insolente y pretencioso, como en el 2013 lo ratificó El País de España, considera que su premiada Juste la fin du monde es su mejor película, más allá de la crítica dividida que tuvo durante la presentación en Cannes. (E)