Juanes lo promocionó en su cuenta oficial de Twitter @juanes el 28 de abril pasado. “Comprando esta litografía del ecuatoriano @JuanMiguelMarin ayudas a niños afectados por el terremoto #Ecuador”. E hizo el enlace a la galería virtual del quiteño que desde Estados Unidos busca hacer un aporte a Manabí, tierra que lo acogió desde los 10 años de edad, y que fue de las mayores afectadas por el sismo de magnitud 7,8 en la escala de Richter, el 16 de abril.

Este Diario contactó al creativo que reside en Brooklyn y que al conocer de los efectos del terremoto y que “entre las víctimas fatales están amigos del colegio y miembros de sus familias”, buscó el método de ayudar y enfocarse en la niñez manabita. Juan Miguel Marin (así, sin tilde escribe su apellido en correos y redes sociales) estudió la secundaria en Portoviejo, su padre es manabita, por lo que nunca ha podido decir que solo es de Quito o de la capital de Manabí, confiesa.

Tras el desastre natural consideró que la forma más viable de ayudar –frente a la imposibilidad de viajar– era a través de su arte, con una edición de 300 copias de litografía, cuya impresión fue donada por la firma Hemlock (Vancouver, Canadá) en formato de 45,72 x 60,96 centímetros.

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“Los trazos son parte de una serie que llevo desarrollando hace algunos años y que tiene por título Bajo la influencia. A diferencia de todos los dibujos que forman parte de la serie, esta vez intencionalmente seguí la forma del territorio ecuatoriano, con un pequeño detalle en el lugar del epicentro. Usualmente estos dibujos no tienen una forma preconcebida”, explica.

“Gente en cualquier parte del mundo puede comprar la obra en mi galería virtual”, añade.

El precio de la litografía es de $ 75. Aunque Juanes no ha adquirido una, el que lo haya tuiteado en su cuenta oficial es generoso con la iniciativa y muestra de solidaridad del artista, a los ojos de Marin. (I)