Una niña británica de un año venció la leucemia que sufría gracias a un tratamiento, inédito hasta ahora, con células inmunes manipuladas genéticamente para combatir la enfermedad. Layla Richards siguió el tratamiento en el hospital Great Ormond Street (GOSH) de Londres.

Había sido tratada con quimioterapia y un trasplante de médula, pero el cáncer volvía y los médicos prácticamente la desahuciaron. Surgió entonces la posibilidad de aplicarle un nuevo tratamiento experimental que estaba siendo desarrollado por el hospital y que consistía en modificar genéticamente células blancas de un donante sano para que hicieran frente a esa leucemia resistente. Ahora está sana, es casi un milagro, según el profesor Paul Veys, director de trasplantes de médula en el GOSH y médico de cabecera de Layla. (I)