No tiene la misma fama que el padre Alberto (Cutié), exsacerdote católico –ahora anglicano– que en el 2009 dejó la vida clerical para casarse, pero la decisión del cura alemán Helmut Guggemos de colgar la sotana para contraer nupcias ha causado la misma sorpresa, sobre todo porque él dio la noticia en pleno sermón dominical.

Como si se tratara de un acto de confesión, el entonces párroco de la iglesia de San Marcos, en Weissenberg, a orillas del lago Boden en Alemania, hizo la reflexión bíblica de las lecturas del domingo y luego contó que se había enamorado de una mujer del norte de Alemania, con la que pensaba casarse y crear una familia.

Según los medios de la región, el sermón de Guggemos fue escuchado en profundo silencio y al final del mismo los fieles empezaron a aplaudir emocionadamente. Hubo hasta ovaciones, detallaron en sus notas.

Publicidad

“Fue algo tan intenso que se me puso la carne de gallina”, expresó Guggemos al diario Lindauer Zeitung.

“Ahora estoy feliz y aliviado de poder reconocer de manera abierta y honesta mis sentimientos por la mujer que quiero”, anotó el otrora sacerdote y añadió que el apoyo de los fieles le dio fuerzas. “Si pudiera seguir siendo párroco con mujer y familia, naturalmente me hubiera quedado”, aseguró.

Además de reseñar el hecho y de recoger las declaraciones de Guggemos, la prensa local trajo a la memoria de que la suya era la segunda ocasión en que una localidad del lago Boden (suroeste de Alemania) pierde a su párroco a causa del amor.

Publicidad

En octubre pasado, en Wasserburgo, a 10 kilómetros de Weissenberg, el párroco Martin Steiner también colgó los hábitos para casarse con una mujer, aunque lo hizo sin despedirse de los fieles en un sermón.

La marcha de Guggemos, de 45 años, ya era conocida, pero la página web de la iglesia había explicado que dejaba el puesto por razones de salud. (I)

Publicidad

Detalles
Decisiones

Debate
Con las deserciones de sacerdotes como Helmut Guggemos –y de otros como Hubertus Wolfgang Berka, un exdiplomático vaticano–, se reabre el debate de que la Iglesia católica ponga fin al celibato.

Carta
Según infobae.com, en 2005 sacerdotes católicos casados del mundo pidieron en una carta abierta al ahora papa emérito Benedicto XVI revisar los requisitos para ejercer la vocación.

En agenda
En febrero pasado, en una cita con miembros del clero de Roma, el papa Francisco dijo tener a los curas casados en su agenda.

Publicidad