Un cachorro ecuatoriano se salvó de ser sacrificado en España, gracias al pedido en las redes sociales de que se respetara su vida, en una campaña que reunió más de 90.000 firmas, señaló una publicación de Ecuavisa.

Por una confusión el pequeño Buddy, de raza french, fue retenido en el aeropuerto de Barcelona, tras llegar de Estados Unidos adonde sus dueños lo habían llevado para aplicarle una vacuna antirrábica.

Al llegar a la ciudad española el escáner no detectó el chip que lo acreditaba como protegido contra la rabia.

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Entonces, Susana González, dueña del animal, declaró a Ecuavisa que las autoridades sanitarias señalaron que una de las sanciones era ejecutar al cachorro.

Sin embargo, tras la campaña en el sitio www.change.org se consiguió que Buddy fuera revisado por un veterinario, quien le instaló un nuevo chip y dispuso que lo trasladaran a un centro de animales en Barcelona, donde estará en cuarentena hasta el próximo mes. (E)