El artista español Joaquín Sabina no tiene pelos en la lengua. Con el discurso directo que lo caracteriza habló ayer de temas como su gira o el reciente escándalo de la FIFA.

Señaló que retomó el disco 500 noches para una crisis, no como una estrategia de marketing, sino para volver a su ‘amadísima’ Latinoamérica. Calificó a esta gira como la más gratificante y destacó que al volver a poner en escena esas canciones “las interpreta con más corazón, con más rabia que cuando las compuso”.

También analizó lo sucedido en la FIFA y confesó: “Una de las alegrías que tuve ayer (martes) es ver dimitir a (Joseph) Blatter. Son una banda de gangsters, lo han sido siempre, viviendo de la ilusión de la gente que es el fútbol y han hecho cada barbaridad”.

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Fue claro al indicar que no le gustan los nuevos géneros. “Me alimenta más leer, que escuchar esa música que se está haciendo, tan absolutamente repetitiva, escritas por gente que nunca ha leído un libro en su vida, ni sabe juntar dos palabras, no sabe ni rimar, malditos sean”, dijo el artista, quien ofrecerá un show mañana en la capital. (I)