Degustar las famosas roscas de harinas elaboradas en hornos de leña, observar las laboriosas manos de Pastor Mero rematando sombreros de paja toquilla o los restos arqueológicos del museo Largacha y captar las mejores gráficas del parque general donde se levanta el monumento a Eloy Alfaro Delgado son parte del circuito patrimonial de Montecristi.

En el centro de esta urbe se guarda, elabora y saborea su historia. La llamada plaza central y el parque Cervera liga a esta cuna con Alfaro, conocido como el Viejo Luchador.

Cerca está la vivienda de Víctor Larrea, quien ahora hereda esa morada. Jorge Cedeño, historiador manabita, dijo que la casa fue construida por los años 20 del siglo pasado por Gustavo J. Barcia, a base de enquinche y caña, que en algunos lados conserva.

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A unos 300 metros, en la calle 9 de Julio, tiene su espacio el museo Arqueológico Largacha, creado por iniciativa propia por las hermanas Maruja, Pilar y Patricia Largacha Cevallos, quienes adquirieron desde hace 40 años figuras de barro vendidas por comuneros. Actualmente se remodela el lugar para poner en valor piezas de culturas de la Costa.

Casi topando la vía que enlaza a Montecristi con Manta, Portoviejo y otras urbes se levanta la panadería de Antonio López. Su particularidad es que los productos son preparados en hornos de leña.

A diario produce unas 8 mil roscas que pueden ser acompañadas con queso de Chone y café de Jipijapa.

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Al escalar las faldas del cerro Montecristi es inevitable visitar la calle 1 de Mayo. En una casa esquinera se levanta la morada de Pastor Mero, un hombre que ha dedicado sus casi 80 años a rematar, azocar y darles la tonalidad con azufre y hasta planchar los sombreros de paja toquilla que por millares se lucen en el mundo.

Un lugar obligado por su historia y por haber sido donde se aprobó la última constitución es el complejo Ciudad Alfaro, que guarda parte de los restos y parte de la vida de Eloy Alfaro.

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Tatiana Hidrovo, titular de la corporación Ciudad Alfaro, indicó que el circuito patrimonial de Montecristi busca elevar la autoestima de los habitantes de este cantón y poner en valor esos lugares. (I)