La Iglesia católica de El Salvador aguarda la pronta beatificación del asesinado arzobispo Óscar Arnulfo Romero, luego que el Vaticano validó el viernes pasado su “martirio”, aseguró ayer una fuente eclesial.

“Nosotros estamos sumamente contentos, sumamente agradecidos con Dios, con el papa, con la iglesia (por validar el martirio) y pensamos que (...) va a ser pronta la beatificación, pero también la canonización”, exclamó el arzobispo de San Salvador, José Luis Escobar.

El viernes se conoció que el Vaticano dio un paso hacia la beatificación de Romero, después de que la comisión de teólogos de la Congregación para las Causas de los Santos validara el “martirio” del prelado asesinado hace casi 35 años, según informó el diario del episcopado Avvenire. Con ese reconocimiento no será necesario demostrar que realizó algún milagro para beatificarlo.

Publicidad

Escobar dijo que la beatificación es un paso previo a la canonización, aunque el papa como autoridad suprema de la iglesia puede dispensar el milagro y canonizarlo de una vez, como ocurrió con el papa Paulo VI.

Recordó que “con extraordinaria clarividencia” antes de su asesinato Romero dijo: “Mi disposición debe ser dar mi vida por Dios cualquiera que sea el fin de mi vida”.

Llamado “la voz de los sin voz” por denunciar injusticias y la represión, Romero fue asesinado por un francotirador contratado por la ultraderecha cuando oficiaba misa en una capilla del hospital de cancerosos la Divina Providencia el 24 de marzo de 1980, marcando el inicio de la sangrienta guerra civil que duró hasta 1992. (I)