Crítica de música: El Dúo Moonflower

Descrita por Santiago San Miguel como una cantante con un “rango vocal de 4 octavas” y por este cronista como “dueña de un pulmón adicional”, Silvia Flores cantó en dueto con Roberto Andrade manejando teclados y bajo el nombre de Moonflower en el Pintxo de Plaza Lagos.

Arrancaron cantando More than words de Extreme, una bellísima melodía romántica. Roberto a continuación interpretó El Duelo mostrando que puede lograr registros altos, se turnó con Silvia, confirmando que son un dueto auténtico.

La balada romántica es a menudo autocompasiva, como en el caso de Me quedaré solo y en Te necesito Roberto cantó, esta vez, en registros medios y Silvia ofreció sus mejores tonalidades.

El romanticismo pop en Nena, de ritmo contagioso fue, junto con Es por ti, lo mejor de la noche con Silvia dominante y virtuosa.

Buenas pistas animaron Persiana americana de Cerati y la balada rítmica de rock Obsesión ofreció un sonido dinámico en contraste con una letra trágica. Ya en la Isla del sol escuchamos a Silvia tararear y a Roberto cantar “Eres lo más bello que me pudo pasar”.

Sirena, balada rítmica y funky, con pistas percusivas mostró el mejor canto de Roberto en registros medios y una gama de recursos vocales de Silvia incluyendo una especie de rapeo inusual, veloz y lírico a la vez.

Colgado en tus manos, cantado por ambos, linda música con pistas de cuerdas llamativas, también fue punto alto del recital.

Silvia y Roberto visiblemente animados por el tempo en No dices más confirmó que el Dúo Moonflower no es una improvisación y que Roberto puede dar una vocalización muy sensitiva para acoplarse a Silvia.

De los 80 hicieron Ni tú ni nadie, con un ritmo alegre y desenvuelto. Refrescante cambio a la balada desafiante en vez de sufridora.

Como de costumbre, Roberto arrancó en Cómo pudiste como reclamo agresivo, también recurrente en la balada; antes de finalizar la noche ambos cantaron Volcán, versionando al famoso José José en tonalidades graves y utilizando pistas dinámicas.