Judi Dench, ganadora de un Óscar y toda una dama de los escenarios británicos, lamentó el elevado dispendio económico que tienen que hacer las nuevas generaciones de intérpretes.

La oportunidad de formarse en buenos centros de actuación y lograr el salto a la élite solo lo tienen los hijos de familias ricas, dijo al diario británico Observer, que puso como ejemplo la costosa escuela privada en la que se formó Benedict Cumberbatch.

La actriz no acepta las excusas del gobierno de invertir el dinero en hospitales o en teatros. “En una sociedad civilizada debería haber dinero para ambas cosas”, señaló la intérprete de 79 años.