Lo que le da autoridad e identidad al cristiano es la unción del Espíritu Santo y no cinco licenciaturas en teología, afirmó ayer el papa Francisco durante la misa en la Casa Santa Marta, en la que recordó que la gente seguía a Jesús porque llegaba al corazón, no como los doctores de la ley que con su sabiduría humana “no eran capaces de hacer que el pueblo encontrara su propia identidad”.

Durante su homilía, el papa señaló que Jesús no era un predicador común, sino que tenía la autoridad que viene de la “unción especial del Espíritu Santo”. Es “el Hijo de Dios ungido y enviado” a “traer la salvación, a traer la libertad”, aunque algunos “se escandalizaban” por este “estilo de Jesús”, por su identidad y libertad.

En ese sentido, dijo que “si nosotros los cristianos no comprendemos bien las cosas del Espíritu, no damos y no ofrecemos un testimonio, no tenemos identidad”. Y agregó: “Todos debemos pedir esto. Señor danos la identidad cristiana, la que tú tenías. Danos tu Espíritu. Danos tu modo de pensar, de sentir, de hablar: es decir, Señor, danos la unción del Espíritu Santo”.