La feria taurina de San Fermín arranca hoy en una Monumental de Pamplona que desde hace décadas es tanto un infierno, por el serio toro y el ambiente de la plaza, como un oasis, por las grandes entradas y la solvencia económica de la organización, en el gran circuito anual del toreo.

Comienzan ya ocho días de fiesta total y diez jornadas de toros, que harán de nuevo de Pamplona el centro geográfico y universal de la tauromaquia hasta el 14 de julio, cuando se cante el Pobre de mí.

Como todos los años en la Casa de Misericordia, popularmente conocida como la Meca, se ha organizado un abono en el que se mezclan todo tipo de toreros y ganaderías.

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En esta edición destaca el debut del hierro salmantino de Garcigrande, preferido por todas las figuras, y la vuelta de las divisas de Jandilla y Adolfo Martín, que presentará un lote de toros de impresionantes cabezas. Completan la lista de ganaderías los clásicos de San Fermín como Miura, Torrestrella, Dolores Aguirre, Fuente Ymbro y Victoriano del Río.