Controlen el aire. Manos a los costados. Adelante las mujeres. Atrás los hombres. Es la voz de Fabián González. Es tenor, pero en el momento que pronuncia estas palabras no está cantando. Está ejerciendo de profesor.

González, integrante del coro Festiva, que pertenece a la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, es también uno de los profesores de la agrupación. Comparte la labor con Ruth Díaz, Carlos Bolaños, Elisa Ortega y otros jóvenes músicos que, asimismo, son parte de la institución.

El coro posee su sede en el Teatro Centro Cívico. En ese lugar del sur de la ciudad, de lunes a jueves se reúnen hombres y mujeres que aman cantar, para ensayar y alistar repertorio.

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Hay jóvenes. También adultos. Hay de todas las edades. No existen límites. El único requisito es ser afinado, dice Elías Tagle, el coordinador del coro, entidad que cuenta con la dirección general del maestro Davit Harutyunyan, director de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil. Y para constatar la afinación, al aspirante a ser miembro del coro se le hace una audición.

Por estos días, Festiva alista la Misa de coronación, de Mozart. En los ensayos repiten su canto una y otra vez, hasta que suene bien. Hasta que se escuche óptimo. “Muchos piensan que el tenor debe cantar así”, les menciona González, mientras engola la voz. “El canto tiene que ser natural, como hablas”, señala a continuación. Y el ensayo sigue. Entre los integrantes está Diego Kang, de 21 años, estudiante del ITAE, quien tenía junto con unos amigos una banda musical, “que era un puro griterío”, dice en broma.

La más joven es quizá Gianella Murillo Orellana, de 16 años, estudiante del colegio Guayaquil. “Se siente bonito”, anota. Y le gusta, porque cantar en un coro, según dice, “es hacer cosas que otros no hacen”. Su intención es estudiar canto. “Aquí los integrantes crecen como músicos”, manifiesta Tagle.

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Dice Harutyunyan que el objetivo es crear un coro grande y profesional, puesto que los coros de Guayaquil son amateurs y de cámara. La idea es que este intervenga en montajes con la Orquesta Sinfónica de Guayaquil (el año pasado montaron, por ejemplo, Carmina Burana), y que se presente también solo, que tenga un programa propio. “Es el modelo de las grandes ciudades”, sostiene el director.

Anota que hay gente que tiene la capacidad de cantar, pero no sabe cómo hacerlo. “Aquí se les enseña a manejar la voz”, indica Harutyunyan. Quienes imparten sus conocimientos son cantantes escénicos líricos. Los ensayos siguen cada noche, como un ritual al que van quienes tienen vocación. Allí están jóvenes como Anabelle Soria Vega, de 22 años, y muchos otros.

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Datos
EL CORO.

Convocatoria
Las audiciones del coro Festiva son de lunes a viernes, de 18:00 a 20:00, en la sede de la Orquesta Sinfónica de Guayaquil, en el Teatro Centro Cívico (Guaranda y García Goyena). Teléfonos: 258-3798, 258-3883.