Deifilia Landeta, responsable de inmunizaciones de la Dirección de Salud de Cotopaxi, señaló que se están tomando las previsiones necesarias para evitar el contagio de sarampión del genotipo B3, propio de África, que en las últimas semanas se presentó en la vecina provincia de Tungurahua. Ante ello se reforzó la campaña de vacunación por medio de microfases.

La Dirección de Salud está implementando cercos epidemiológicos. Es así que al existir sospecha de algún caso, de manera inmediata se aísla al paciente y se envían las muestras a Quito para que se las analice. Mientras se inician los respectivos tratamientos médicos. En Cotopaxi ha habido casos sospechosos, pero todos han resultado negativos hasta este día, aseguró la funcionaria.

Durante estos días se les pidió a las madres que lleven hasta los hospitales y centros de salud a los niños que aún no recibieron la vacuna, que ya se les suministró en el 2010. Para ello deben acercarse con el carné de vacunación, además deben prestar atención a síntomas como fiebre, erupciones cutáneas, afección a vías respiratorias, diarrea.

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El director de Salud de Cotopaxi, José Izurieta, explicó que se está aplicando un plan de contingencia que consiste en vacunar a los viajeros, operadores turísticos y a quienes salieron del país. Indicó que existen suficientes vacunas y que el personal de salud ha sido capacitado, sin embargo, hace falta la colaboración de los padres de familia, señaló.