Ecuador colocó 2.500 millones de dólares en bonos en el mercado internacional, confirmó el ministro de Economía y Finanzas. La colocación es a 10 años y a 8,87% de interés.

Este anuncio se ha hecho cuando se acaba de informar que el Banco Central ha utilizado 500.000 onzas de oro para realizar dos operaciones destinadas a obtener liquidez y que se ha contratado un crédito con el Fondo Latinoamericano (FLAR).

No hacen falta muchas explicaciones si recordamos la presentación del real estado de la economía del país que dio a conocer el actual presidente en una de sus primeras intervenciones. O si tenemos en cuenta el monto de la deuda recibida y la venta anticipada de petróleo que deja al país sin buena parte de su más importante fuente de ingreso.

Es difícil de entender esa realidad, después de un periodo en el que el país recibió más ingresos que en los periodos anteriores, aun en los más prósperos. Los ciudadanos, no expertos, nos preguntamos qué pasó: ¿fue impericia?, ¿despilfarro?, ¿corrupción? ¿No se entendió que las acciones de un gobierno se encadenan con el futuro? Lo que sí es claro es que la mesa se la sirvieron y esperan que otros paguen la cuenta y busquen con qué hacerlo. (O)