El suicidio de adolescentes aumenta, muchos sufren estrés, miedos, depresión, confusión, dolores de cabeza, no pueden dormir, no se alimentan bien, etcétera.

Los padres tienen que hablar más con los hijos, el apoyo moral a nosotros adolescentes, y a los jóvenes, es importante.(O)

Úrsula Aucapiña,
Guayaquil