En la página 9 del Diario EL UNIVERSO de acertada dirección, en la sección Opinión, de fecha 31 de julio de 2017, con el título “¿País de mierda?”, escribe el doctor Ramiro García Falconí y hace referencia al proceso penal que por calumnia al doctor Carlos Pólit Faggioni, se siguió en contra de la Comisión Anticorrupción, dentro del cual me tocó patrocinar la defensa del ahora excontralor, y que dio lugar a una sentencia condenatoria emitida por la jueza Karen Matamoros Orellana.

El referido articulista de opinión, quien actuó en defensa de los acusados, tratando de justificar un fallo adverso a sus pretensiones y soslayando la verdad procesal, agrede y reprueba la actuación de la referida jueza, quien sin dejarse intimidar de la turba que apoyaba a los sentenciados, emitió una decisión apegada a la ley, pues este proceso se originó por una denuncia de la Comisión Anticorrupción que había sido declarada “maliciosa y temeraria” por un juez de la Corte Nacional de Justicia. Así como no comparto que se califique como “decisión loca”, la emitida por la referida jueza; como profesional del derecho hago mías las expresiones del doctor García Falconí en cuanto a la persecución de los jueces por parte de esa nefasta Comisión de Disciplina del Consejo de la Judicatura, que con el pretexto del “error inexcusable” ha socavado la independencia del Poder Judicial. Pido la publicación de esta réplica por ser un derecho establecido en la Constitución de la República.(O)

Hernán Ulloa Parada, doctor en Jurisprudencia, Guayaquil