El presidente ha concedido el indulto a Edmundo Buñay Dongilio, considerando que “ha manifestado expresamente su arrepentimiento profundo y por los daños que se produjeron como consecuencias”. Se refiere a la participación del indultado en el caso Cofiec, por el cual fue sentenciado a ocho años de reclusión mayor ordinaria por el delito de peculado, cometido durante su gobierno. Lo último actuado en el proceso fue la ratificación de la sentencia por el Tribunal de la Sala Penal de la Corte Nacional de Justicia, el mes de enero de este año.

Buñay fue quien ordenó la operación del crédito de 800.000 dólares al ciudadano argentino Gastón Duzac, sin la debida presentación de las garantías y sin el cumplimiento de todas las normas legales, y además autorizó el inmediato desembolso a cuentas del exterior.

El indulto es una de las atribuciones que la Constitución concede al presidente de la República, sin embargo, la decisión no es una buena señal, cuando el clamor ciudadano es el combate a la corrupción y a la disposición indebida de los fondos públicos. Contradice, además, el propio discurso oficial sobre el tema.(O)