Fue el presidente constitucional de la República Alfredo Baquerizo Moreno quien decretó que, el 13 de abril de cada año, se celebre en toda la República la fiesta del maestro, considerando que el día del nacimiento del escritor Juan Montalvo era el más adecuado para este fin.

Este decreto se dio el 29 de mayo de 1920 y se promulgó en el Registro Oficial Nº 1109 del 10 de junio de 1920. Se agregaron en años posteriores los nombres de los egregios maestros González Suárez, Luis Felipe Borja y Víctor Manuel Peñaherrera. El gobierno de revolución lamentablemente no dio importancia a esta celebración, que fue tradicional para estimular el espíritu de colaboración del servidor de la educación. O, asombrado en cierta ocasión decir a un exministro de Educación que cuando oyó cantar en una escuela rural el himno al maestro, pensó que debería cantarse el himno al alumno; a lo mejor ignoraba ese funcionario que la educación se basa en la trilogía alumno, maestro y padre de familia. Ojalá el nuevo gobierno entrante cumpla con este decreto que no se ha derogado y escuche a los maestros que piden que se respeten sus horas de descanso, pues son llamados a veces a trabajar sábados o domingos, o a levantarse en las horas de la madrugada a poner calificaciones en la plataforma de internet. (O)

César Burgos Flor, licenciado, periodista; Guayaquil