No votaron por el continuismo y ahora que vendrá una segunda vuelta dicen que lo harán. Lo he escuchado a estudiantes, vulnerables ante la tendencia de las redes sociales y la falta de madurez de criterio. Oírlo, en cambio, en adultos es entender que su voto no es analizado, simplemente es un juego de azar.

Y como decía un analista político, el que piensa así y dice como una parte del pueblo: “doy mi voto al menos ladrón o al que roba y hace carreteras”; termina siendo parte o es cómplice en pensamiento de una línea sin valores. (O)

José Vicente Franco Calixto, Guayaquil