Los productos hechos en Ecuador que tengan alguna denominación de origen europeo deberán cambiar de nombre.

Esto se debe al Acuerdo Comercial Multipartes con la Unión Europea, que está vigente y que contiene cláusulas que protegen la denominación de origen. En el caso de Ecuador, solo tenemos dos: el sombrero de paja toquilla de Montecristi y el cacao arriba.

Las empresas tendrán que cambiar las etiquetas y concebir campañas de difusión que le digan al consumidor el nombre con que podrá encontrar el producto que estaba acostumbrado a comprar. Los ejemplos más claros quizás están en los quesos, los fabricantes ecuatorianos de quesos con las características del parmesano o manchego ya no podrán etiquetarlos con esos nombres.

Pero el tema va más allá de la etiqueta, tendrá que ver con la calidad, pues nuestros quesos con otro nombre, pero con las mismas características, probablemente deberán competir con los del lugar de origen.

Inicialmente, parece molesto para productor y para cliente, pero a la larga será útil porque, como deberíamos esperar, nos dará la satisfacción de preferir lo nuestro. (O)