El 19 de noviembre de 2003, en un operativo policial para repeler un asalto en una farmacia ubicada en la Alborada, murieron ocho personas y otras cuatro resultaron desaparecidas. Entonces, una corte policial actuó en el caso contra 20 policías sindicados, quienes fueron declarados inocentes por falta de pruebas.

El hecho fue denunciado a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que acusó al Estado ecuatoriano de haber realizado ejecuciones extrajudiciales, lo que fue negado por las autoridades.

El 23 de enero de 2014 se realizó la reconstrucción de los hechos y, finalmente, el 6 de noviembre de ese año el caso terminó. Se dispuso 16 años de prisión a seis procesados y 2 años a siete cómplices.

Ahora el fiscal Galo Chiriboga ha anunciado que uno de los supuestos desaparecidos fue identificado en Venezuela, el domingo volvió al Ecuador y está dispuesto a rendir su declaración, lo que podría permitir identificar a los responsables de las desapariciones para que reciban la sanción correspondiente. Trece años han sufrido los familiares de los desaparecidos, por lo que es de esperar que la justicia actúe rápido y aplique la ley sin contemplaciones. (O)