Hace meses empezaron a deteriorarse muchas juntas de caucho en los diferentes pasos elevados de Guayaquil, los vehículos pesados han hecho que las juntas se conviertan en enormes huecos que perjudican a los carros pequeños. En el kilómetro 4,5 se cubrió una parte de los huecos con planchas de acero que también afectan a los carros. Pagamos impuestos, pagamos por la revisión de vehículos y se nos perjudica por el mal estado de las calles. Hacemos ver a las autoridades estas falencias. (O)

Carlos Aguilar Maldonado, Guayaquil