Una vez más la policía capturó a delincuentes dedicados a la trata de personas. Esta vez actuaron 450 policías de élite que en cuatro ciudades detuvieron a 11 personas, entre ellas una mujer policía, sospechosas de integrar una banda dedicada al tráfico internacional . Culminó así una investigación que ha durado dos años.

Los delincuentes operaban desde Ecuador, especialmente, prometiendo a ciudadanos asiáticos que los harían llegar a Estados Unidos, a cambio de 40.000 dólares.

La trata de personas es un delito creciente que no solo engaña a quienes quieren llegar a otro país para buscar mejores condiciones de vida, sino a jóvenes mujeres a quienes les prometen trabajo en el extranjero, sin advertirles que se trata de prostitución, o a jóvenes matrimonios que desean adoptar a un niño y les ofrecen bebés robados a cambio de grandes sumas de dinero.

El delito es grave, es la manifestación extrema de la cosificación de los seres humanos a quienes se convierte en objeto de compra y venta, como cualquier cosa, con los riesgos de degradación y hasta muerte a los que se expone a las víctimas.

Los operativos deben seguir, hasta erradicar del país las mafias que se dedican a este crimen. (O)